Me pasó otra vez lo mismo. Reflexión Cristiana ¿A quién le gusta tener un auto limpio, bonito y resplandeciente? El auto puede ser el mejor pero si está sucio no parece el mejor.
Ser una buena madre es todo un reto, no hay atajos para llevar a los hijos sino es por el camino correcto que deben andar. Dios bendiga a la madre que se esfuerza por sus hijos y aún con sus limitaciones les da lo mejor.