Todas las cosas ayudan a bien a los que aman a Dios

Todas las cosas ayudan a bien a los que aman a Dios ,Reflexiones cortas, meditaciones cristianas, Postales imágenes, tarjetas cristianas. Reflexiones de motivación.

Todas las cosas ayudan a bien a los que aman a Dios
No entendemos muchas cosas de la vida, ¿Cómo es posible que tengamos que pasar por pruebas, cómo puede eso tener sentido y ayudarnos? 

José, un joven de Israel, tuvo muchos problemas con sus hermanos por ser el favorito de su padre.  Fue vendido por ellos a gente de Egipto, se lo llevaron como esclavo, y esta historia verídica termina con un final feliz, cuando José le dice a sus hermanos, años después, cuando fueron a comprar comida, que los perdona, que tal vez todo había sido dispuesto para que toda la familia de sus hermanos y su padre, no sufrieran por la hambruna que azotó los países.
 

El único país que tenía comida era Egipto, dada la buena administración de José y la bendición de Dios con él, que ya no era esclavo, sino gobernante, en guardar comida en los años de abundancia, esto lo había sabido por la interpretación de sueños al Faraón, que habrían años de abundancia y luego años de escasez. 


Es difícil ver cómo pueden las cosas poco agradables ayudar a bien, pero lo cierto es que en medio de esos problemas debemos honrar a Dios, no apartarnos, sino buscar más su presencia, pedirle que nos ayude a entender para qué estamos pasando por esa situación, porque las cosas ayudan a bien a los que son llamados según el propósito de Dios.

¿Cómo pueden ayudarnos todas las cosas para nuestro bien?
-          Podemos tener crecimiento en nuestra vida espiritual a través de superar una prueba.
-          Podemos ayudar a otros a superar los mismos problemas por los que nosotros pasamos, puede ser un aliento saber que alguien más los superó, ya sea un divorcio, un conflicto familiar, miedo a presentar un examen, un choque, una enfermedad.
-          Podemos sensibilizarnos con nuestra familia o con la comunidad luego de pasar por una emergencia.
-          Dios puede estar trabajando con nuestro orgullo, egoísmo, pecado, falta de amor, impaciencia , falta de tacto, de perdón y muchas cosas que si no suceden no despertamos y nos damos cuenta que estamos fallando y necesitamos rectificar.
 

Sin embargo, nuestra naturaleza de orgullo puede ser un obstáculo para que veamos el lado de crecimiento de la situación. Examinemos nuestro camino y seamos humildes de corazón para reconocer a Dios en nuestra vida y permitirle que nos lleve por su voluntad que es agradable y perfecta. Por Mery Bracho

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