Nuevas
oportunidades tienes, dile adiós a las que ya pasaron.
No
siempre nuestros sueños se vuelven realidad, o tal vez lo intentamos y resulta
en una realidad no esperada. En estos casos lo consideramos un fracaso. La buena noticia es que podemos empezar con
otros sueños. No te detengas.
Con el fin de ponerle corazón, empeño y acción a este nuevo sueño
necesitamos cerrar el otro capítulo. Eddy Ketchursid dice: Si tu caballo está
muerto, ¡por el amor de Dios, desmonta!
Ya
no vale la pena cabalgar en esos sueños muertos cuando ya ha pasado esa
oportunidad. Dejemos de saborear esos amargos fracasos y quejarnos. Dios está
listo para ayudarnos a llevar adelante un nuevo sueño, con valentía y esfuerzo.